El viernes estuvo fantástico para jugar.
Los equipos se armaron de la siguiente manera:
Equipo 1: Víctor, Marito, Cacho, Chuli, Checho y Fernan (Bilbao)Equipo 2: Kbzas, Roberto, Cristian, Angel, Fabian, Totti y Javier Laxi.
Comentario del Partido
Al comenzar el partido al estar en igualdades de condiciones es decir 6 para 6 jugadores, mi equipo lo tenía a mal traer a su portero Cristian. Desde todos los ángulos lo castigamos con tiros potentes y el balón no podía tocar la ansiada red. Se lució el portero, consagrándose el mejor jugador de su equipo.
Desde atrás Chuli y Yo tratabamos de alejar a los adversarios de nuestro arco, tocando siempre a Cacho para que distribuya el balón. La araña aunque todavía le falta un tanque de O2 extra, supo manejar la pelota bastante bien. Marito y Fernan fueron una linda combinación, haciendo un fútbol mas rápido y preciso. Checho aunque jugó bien, le falta ese agregado de velocidad para no frenar jugadas con sus pisaditas.
Al llegar a la primera mitad, el marcador nos favorecía por 3 goles de diferencia. Pero con la llegada de Totti el equipo de Kbzas pasó a formar con 7 jugadores. Poniendo el pecho a la situación, mantuvimos el resultado un tiempito más. Pero al correr los minutos, nuestro estado físico sintió el desgaste y los contrarios comenzaron a achicar la diferencia hasta llegar a estar arriba en el marcador.
En ese trajín, Roberto, Fabian y Totti comenzaron a apretarnos con sus pases de primera y abiertos, convirtiendonos goles fácilmente. A esa altura el del Bilbao "Fernan" ya no bajaba, Chuli estaba en primera marcha y a mí me costaba bajar rápido.
Angel en la defensa parecía una mole, difícil de cuerpear y pasar. Kbzas organizaba todo desde atrás y muchas veces solo con la mirada(parecía el gran jugador de metegol).
Javier Laxi comenzó bien dando pases, pero nuevamente la tentación de Seguirla con el balón le ganó y no lo soltaba ni a palos. Fabían volvió sin aire y a pura hacha como siempre. Me lo chicaneó varias veces al Bilbanence.
Faltanto pocos minutos, "La Barbie" Roberto junto con Kbzas comenzaron a llorar cada salida de balón, haciendo tiempo, inventando manos, pidiendo la hora. Nunca vi a un equipo arrugar tanto con un hombe de más. EL viernes le tiramos maíz.
Mi equipo con guapeza, garra, sangre caliente en el pecho y criolla del norte, fue una topadora en los últimos minutos, llevandose al rival por delante, faltandole el respeto a ese hombre de más, achicando la diferencia en el marcador.
Aunque no nos alcanzó, quedó claro cuál fue el mejor equipo con personalidad.
.